Puntaje del Disco: 8,5
- The Girl From New York City: 7
- Amusement Parks USA: 7,5
- Then I Kissed Her: 8,5
- Salt Lake City: 7,5
- Girl Don’t Tell Me: 8,5
- Help Me Rhonda: 8,5
- California Girls: 9,5
- Let Him Run Wild: 9
- You’re So Good To Me: 8
- Summer Means New Love: 7,5
- I’m Bugged At My Ol’ Man: 8
- And Your Dream Comes True: –
Como la portada del disco indica, los chicos de playa vuelven a hacer lo que más les gusta: canciones de playa sobre chicas de playa, diversión y noches de playa. Esto puede ser tomado como una continuación o incluso un retroceso de los Beach Boys respecto de Today!, ya que apostaron a volver a lo más comercial y lo que hizo popular a la banda, posiblemente presionados para transformarse en una maquina de Hits, en lugar de adentrarse más a lo que después sería Pet Sounds.
Brian Wilson cumplió con esas expectativas. Aportó sus composiciones pop de playa, pero en un nivel superior que en Today! desde mi punto de vista. Por supuesto, son inocentes, juveniles, llenas de esas armonías vocales y alegría irreverente que los caracteriza, pero simultáneamente más sólidas y divertidas.
En Summer Days (And Summer Nights) se pueden encontrar varias canciones que valen la pena. La que sobresale claramente es “California Girls”, uno de los clásicos mejor logrados de su primera etapa, por sus arreglos y por su famoso estribillo. En un segundo lugar aparece la agradable balada pop “Let Him Run Wild”. Después tenemos a “Then I Kissed Her”, una perlita pop que podría ser tomado tranquilamente como una composición de Ray Davies. “Girl Don’t Tell Me”, en cambio, parece una replica a “Ticket to Ride” de los Beatles. “Help Me Rhonda” es algo zonza, pero es pegadiza y la más comercial del disco. Y la irónica “I’m Bugged At My Ol’ Man” es la ultima de las canciones a destacar.
Es un disco bastante consistente. Puede resultar reiterativo la temática que abordan, pero si tenemos en cuenta la época en que fue lanzado, es de lo mejorcito en el catalogo de los Beach Boys.
Persy
A mi los chicos de Brian Wilson me gustaban tanto cuando eran alegres y desenfadados playeros como cuando se volvieron preciosistas artesanos del Pop. Grandes grandísimos.