Puntaje del disco: 6,5
- Blitzkrieg Bop: 9
- Beat on the Brat: 8
- Judy Is a Punk: 8,5
- I Wanna Be Your Boyfriend: 7,5
- Chain Saw: 7
- Now I Wanna Sniff Some Glue: 7
- I Don’t Wanna Go Down To The basement: 7,5
- Loudmouth: 6,5
- Havana Affair: 7,5
- Listen To My Heart: 6,5
- 53rd and 3rd: 6,5
- Let’s Dance: 6,5
- I Don’t Wanna Walk Around With you: 6
- Tody Your Love, Tomorrow The world: 6
Mientras los ingleses tenían a los Sex Pistols, los yankys se deleitaban con el punk de los Ramones en los setenta. De hecho, son muchos los que le atribuyen la responsabilidad de la aparición el Punk. Aunque lo cierto es que los inicios del punk se remite a bandas anteriores como The Stooges y New York Dolls. Lo cierto es que el disco debut (y homónimo) de los Ramones, lanzado en 1976, fue muy relevante en una época en la cual la actitud revelde empezaría a transformarse en un quiebre artístico dentro del rock que se venía escuchando.
Ahora bien, mi opinión sobre este grupo puede resultar bastante negativa, pero me cuesta entender como sus fanáticos y la critica establecieron y catapultaron a está banda en la cumbre alegando que eran revolucionarios, cuando en realidad The Ramones es uno de los disco más monótonos que existe.
El mismo está compuesto por muchos temas cortos, de un minuto y medio o dos de duración. Pero estos breves cortes son exactamente todos iguales. Es «Hang Onto Yourself» de David Bowie, multiplicado por 14, siendo incluso esta canción superior a cualquiera de The Ramones. Por eso The Ramones significa escuchar el mismo riff, estructura y melodía durante todo el santo álbum. Es uno de los discos más uniformes que un mortal puede apreciar. Pero está uniformidad no es un punto positivo que remarca la solidez del disco, todo lo contrario, remarca la falta de ideas y matices.
Son tan parecidas las canciones que lo más remarcable son aquellas que cuentan con melodías más o menos memorables. Estas son: «Blitzkrieg Bop» (no muy reconocida por su nombre sino por sus “Hey ho, Let’s go!”) y «Judy Is a Punk». El resto sin ser atrocidades estremecedoras, me dan lo mismo. Solo cumplen bien su papel de entretener a alguien que solo quiere moverse un poco o romper sus timpanos de impotencia.
En definitiva, escuchando a Los Ramones quedas advertido que no te vas a encontrar con nada artístico. En absoluto, su gracia tiene otro sentido. Y si no lo compartis, puede hacerte odiar a su punk.
Persy