Andrés Calamaro – Nadie Sale Vivo de Aquí (1989)

andrc3a9s-calamaro-e28093-nadie-sale-vivo-de-aquc3ad-1989-4325277

Puntaje del Disco: 9

  1. Nadie sale vivo de aquí: 8
  2. Pero sin sangre: 8
  3. Vietnam:
  4. Pasemos a otro tema: 9
  5. Con la soga al cuello: 8.5
  6. No tengo tiempo: 8
  7. Señoritas: 8
  8. Adiós, amigos, adiós: 8
  9. Ni hablar: 9
  10. Una deuda al corazón (traicionero): 8.5
  11. No me vuelvas la espalda por eso: 8
  12. Señal que te he perdido: 8.5
  13. Dos Romeos: 8

Desde corta edad Andrés Calamaro estuvo ligado a la música, primero con un bandoneón y luego con un tambor. En su casa del barrio de Once, el pequeño Andrés ya mostraba las dotes para los instrumentos y comenzaba a componer. Tras un frustrado intento de estudio de la carrera de Derecho, fue el piano lo que lo sedujo y le ayudó a inclinar la balanza a favor de la música. A los 17 años formó parte de su primera banda, Raíces, de candombe rock con la que debutó discográficamente.

A principios de los ochenta, Calamaro tuvo la gran oportunidad de involucrase con la élite del rock nacional, cuando Miguel Abuelo lo reclutó para darle vida a la nueva etapa de Los Abuelos de la Nada. Temas como “Mil Horas”, “Sin Gamulán” y “Costumbres Argentinas”, entre otras,  le otorgaron a joven Andrés una respetable consideración entre sus pares. Acompañó a Charly García como soporte de su banda, a la que luego dejó paso a Fito Páez, para dedicarse de lleno a Los Abuelos.

Paralelamente a la carrera con Miguel Abuelo, en 1984 Andrés grabó “Hotel Calamaro”, su primer disco solista, que a pesar de haber sido casi ignorado por el público dejó en el recuerdo temas como “Fabio Zerpa tiene razón” y “Otro amor en Avellaneda”. “Vida Cruel” y “Por Mirarte” fueron los siguientes materiales en solitario, que si bien fueron mejorando respecto a los anteriores, no captó el interés suficiente.

Ya con una banda estable y con Los Abuelos de la Nada disuelta, en 1989 se editó “Nadie Sale Vivo de Aquí”, considerado por la crítica y los fanáticos como uno de los más destacados trabajos de Andrés. Sin embargo, el humor de la gente por la difícil situación económica que atravesaba la Argentina de entonces, no estaba en los ánimos como para enfocarse en los nuevos lanzamientos musicales. Incluso el tema que da nombre al álbum, hace clara referencia a esta coyuntura, aunque letra se dirija en otra dirección.

El disco es básicamente de corte pop rock (“Pero sin Sangre”, “Señoritas”) y significó una notoria evolución en las composiciones. “Pasemos a otro tema”, tal vez el más recordado, es una linda balada con el sello clásico de Calamaro. “No tengo tiempo” y “Adiós, amigos, adiós” en cambio, tienen un estilo más tanguero.

La falta de repercusión entre la gente de este muy buen disco hizo que Calamaro encontrara refugio en España donde luego formaría Los Rodríguez, banda con la que alcanzaría gran éxito.

Piro

Tu puntuación
(Votos: 1 Promedio: 4)

Can – Monster Movie (1969)

Puntaje del Disco: 9

  1. Father Cannot Yell: 9,5
  2. Mary, Mary So Contrary: 8,5
  3. Outside My Door: 9
  4. Yoo Doo Right: 8,5

Para finales de los sesenta un puñado de bandas originarias de Alemania iniciarían el movimiento musical conocido como krautrock, su principal innovación fue incorporar al rock, elementos propios de la psicodelia, de la música electrónica, del minimalismo y de la música experimental, principalmente. Entre ellas se destaco sobre el resto y logro relevancia a nivel mundial Can. Su disco debut Monster Movie (1969) comenzaría a mostrar algunas cosas de lo que mas adelante haría característico el sonido de Can.

En la portada del álbum aparece un robot gigante se trata de Galactus, un personaje de una revista de Marvel Comics de la que la banda era fanática.

Este disco representa un krautrock aún sin cuajar; álbumes posteriores de la banda como el recordado Tago Mago (1973) serán verdaderos representantes del krautrock maduro. Aun así la experimentación e improvisación dice presente en todo el disco, con una base de sonido bastante primitivo, pero no por sin sorpresa y locura que los caracterizaría en sus siguientes trabajos.

Monster Movie cuenta con la presencia del vocalista original de la banda el norteamericano Malcolm Mooney que cantaría también en dos temas mas de su siguiente disco Soundtracks para luego ser remplazado por el recordado Damo Suzuki, pieza clave en la mejor época de Can.

El disco cuenta con solo cuatro tracks pero en su mayoría muy largos, entre ellas la épica improvisación de “Yoo Doo Right” de más de veinte minutos, que en ningún momento te aburre, para solo nombrar un caso.

Monster Movie es una buena muestra de lo que se vería (en forma maximizada y mejorada) en los siguientes trabajos del grupo alemán a principios de los setenta. Un excelente balance entre hipnótica improvisación, experimentación y talento de este gran grupo conocido por pocos.

F.V.

Tu puntuación
(Votos: 1 Promedio: 4)