Puntaje del Disco: 7,5
- Aeoa: 8
- Pejerrey: 8,5
- Zapping: 8,5
- Casi Nadie: 6,5
- A lo de Garú: 8
- Mal: 7
- Faisán: 7,5
- Estupro (Dulce Carola): 7
- Me Vuelvo a Morón: 7
- Los Miserables: 6
- La Crápula: 6,5
- Sangrándonos: 8,5
- Gatillo: 9
- Apila Desgracia: 7
- A sangre Fría: 7,5
- La Noche que me Echaste: 8
1994 fue un año movido y de continuo crecimiento para el conjunto del oeste del conurbano bonaerense Los Caballeros de la Quema. Junto a otros grupos ascendentes como Babasonicos, Los Brujos, Peligrosos Gorriones, Illya Kuryaki and the Valderramas, entre otros, formarían parte de la Gira Nuevo Rock Argentino que los llevaría a tocar por distintos escenarios del país. En Mayo participaron del recital en homenaje al joven asesinado en un recital de Los Redondos Walter Bulacio antes 3 mil personas y además en Noviembre de ese año fueron teloneros de un grupo grande a nivel mundial como Aerosmith en Córdoba y Buenos Aires tocando por primera vez ante más de 50 mil espectadores.
Pero el hecho mas importante de ese año para Los Caballeros fue la edición de su segunda placa Sangrando, una especie de continuación de su debut que logro conjugar cortes interesantes como “Pejerrey”, “Zapping”, “La Noche que me Echaste”, «Sangrándonos» y la no tan conocida pero mi favorita “Gatillo”.
Las ingeniosas letras de un Iván Noble, todavía autentico y no convertido en “ídolo pop”, y el sonido del grupo continuarían madurando con el correr de los años llevándolos a su pico más alto de masividad para finales de la década del noventa gracias al recordado La Paciencia de la Araña (1998).
F.V.