Puntaje del Disco: 7,5
- Radio Song: 5
- Losing My Religion: 9,5
- Low: 8
- Near Wild Heaven: 6,5
- Endgame: 7
- Shiny Happy People: 8,5
- Belong: 7,5
- Half a World Away: 7,5
- Texarkana: 7
- Country Feedback: 8
- Me in Honey: 7,5
En el año 1991, cuando el Grunge se apoderaba de la escena musical, uno de los paladines del Rock Alternativo de los ochenta como R.E.M. no tomaría exactamente la misma vertiente. Al contrario, con Out of Time ofrecería un producto de cualidades que chocan entre sí.
Como aspecto positivo Out of Time se destaca por la diversidad de instrumentación en cada canción. El ejemplo más distintivo sin ir más lejos es la mandolina de “Losing My Religion”. Así que desde ese aspecto tiene su cuota experimental. Por otra parte, los cortes son en general de Folk Rock y Pop Rock, con melodías que están bastante bien pero que simultáneamente son convencionales y en algunos puntos comerciales. R.E.M. con cortes como el hit “Shiny Happy People” y el ya mencionado “Losing My Religion” definitivamente abandona las sombras del under para ofrecer algo más cercano al mainstream. “Losing My Religion” debe ser el tema de R.E.M. más difundido en radios, en MTV y liderando charts como pocos.
Pero el inconveniente del álbum por el cual no es grandioso, es que resulta bastante desparejo. Muchas de las canciones de Out of Time pese a tener melodías en general potables y una instrumentación interesante, no por ello son grandes composiciones. El caso más ejemplar es “Radio Song” en donde formulan una especie de hibrido de Funk con Rap, donde colabora KRS-One, que resulta chocante.
Entre otros experimentos que no son tan habituales en ellos está el popy “Near Wild Heaven”, con armonías vocales a la Beach Boys que no son tan atractivas. También combinan Pop con Spoken Word en “Belong”. Además tenemos tenemos a “Low” y “Country Feedback” con un estilo más oscuro y alternativo que llega a capturarte.
Pero sin dudas sus dos singles “Shiny Happy People” (con Kate Pierson, cantante del grupo The B-52’s, realzando la melodía con su voz) y “Losing My Religion” son los que acaparan la principal atención. Especialmente este último que, con su riff de mandolina, terminarían armando un folk rock que sería el clásico definitivo de la banda de Michael Stipe, aunque no por eso el mejor en la historia del grupo.
Persy