Puntaje del Disco: 7,5
- Viento Loco: 7
- Aventura Nocturna: 7,5
- El Juego Comienza: 7
- Dos Días Después: 6
- No Lograrán Distraerme: 5,5
- La Calle Es Su Lugar (Ana): 8
- Todo El Mundo Va Bailando Así: 6
- Acaba De Nacer: 7,5
- Roca De Ibiza: 6
Los ya conocidos Pablo Guyot y Willy Iturri tocaban juntos en Banana, una banda que duró cuatro años y logró cierta repercusión en los pubs del Gran Buenos Aires. Por otro lado el histórico Alfredo Toth ya venía de integrar legendarias bandas tales como la fundacional del rock argentino Los Gatos, Sacramento (ésta última lanzando solamente un disco con un periodo de actividad muy corto), la banda de León Gieco y la de Nito Mestre. Más adelante los tres formaron parte de la banda de Raúl Porchetto, grabando los discos Metegol (1980) y Televisión (1981). Cuando decidieron independizarse como trío, Charly García convocó al baterista Iturri para su primer álbum, ante tal magnitud de la propuesta, la iniciativa de formar una banda quedaría postergada una vez más. Guyot se incorporó a Zas (la banda de Miguel Mateos) y Toth tocó con Fantasía y con Piero. En el año 1983 decidieron grabar un demo para difusión radial, pero no avanzaron porque Charly volvería a convocar pero esta vez a los tres, para grabar el prestigioso Piano Bar.
Terminado el álbum de García con su correspondiente gira, ahora si los tres músicos estaban dispuestos a comenzar su recorrido como banda, la cual bautizarían con el nombre de G.I.T. (siglas de Guyot, Iturri y Toth).
Para el primer álbum contarían con la producción del mismo Charly García. El disco presenta el típico sonido ochentero del momento, el cual se venía escuchando en las bandas nacionales e internacionales de esa época como Soda Stereo, Virus, Sueter, y en el plano ineternacional The Cure, Talking Head, The Police, etc. Contiene dos de las canciones más populares de la banda como: «La Calle Es Su Lugar (Ana)» que se convirtió en un hito del rock argentino y «Acaba De Nacer». Otros temas conocidos también fueron «Viento Loco» y «El Juego Comienza». El álbum se convirtió en disco de oro al poco tiempo, y tiempo después fue disco de platino.
En cuanto a lírica y composición no son canciones muy rebuscadas por el trío (tampoco en el género new wave) en el cual abarca en su mayoría el álbum. Lo más interesante quizás son los distintos sintetizadores que forman parte de algunos temas, y los ambientes oscuros que proponen varias de ellas y algún que otro arreglo de cuerda que se puede apreciar en ciertas canciónes. La voz aguda y suave de Toth se adapta bien al sonido del disco, y su respectivo bajo va bien acentuado marcando el tempo justo. La batería de Iturri suena simple con algunos cambios dependiendo las melodías, y hay que recalcar el talento de Guyot a la hora de componer algún riff y solo pegadizo para que las canciones suenen un poco más comerciales para su difusión radial.
Este álbum y los dos siguientes hicieron a la banda una de las más representativas del new wave argentino y latinoamericano de los años ochenta, junto con sus pares Soda Stereo, Virus, Sueter, Los Abuelos De La Nada y Enanitos Verdes y por otro lado Los Prisioneros y La Ley de Chile.
Un disco para escucharlo tranquilo o en una fiesta y sin tantas pretensiones. Sería una pérdida de tiempo querer analizarlo compositiva y líricamente debido a que este no es su fuerte. Pero si destacar las melodías y secuenciadores que suenan impecables a lo largo del álbum, lo que hace lo aún más atractivo y anticipando sonidos que se escucharían en la música con el tiempo.
Johnny Prz.