Puntaje del Disco: 8,5

1. I Will Follow: 9
2. Twilight: 9
3. An Cat Dubh: 8,5
4. Into The Heart: 8,5
5. Out Of Control: 9
6. Stories For Boys: 8
7. The Ocean: 7,5
8. A Day Without Me: 8
9. Another Time Another Place: 8,5
10. The Electric Co.: 8,5
11. Shadows And Tall Trees: 8

Había una vez, hace muchos, muchos años (más de 35), un muchacho llamado Larry Mullen Jr. que puso un anuncio en su Colegio de Dublin en el que buscaba gente para formar una banda. El primero en sumarse fue el guitarrista Dave Evans, luego el bajista Adam Clayton. Y por último necesitaban un cantante que fuera además segunda guitarra. Así apareció Paul Hewson que no tocaba bien la guitarra y cantaba aún peor según sus compañeros. Pero según palabras de Larry necesitaban “un cantante con personalidad y él la tenía”. Tiempo más tarde, empezaron a adoptar seudónimos. Evans eligió llamarse “The Edge”. Paul eligió la marca de auriculares “Bono Vox” y así empezó a ser conocido como “Bono” y Larry Mullen Jr siguió siendo Larry Mullen Jr, o simplemente Jr. De esta forma empezaría la historia de U2 que conseguiría su primer contrato discográfico y lanzaría su disco debut, Boy, en 1980.

Boy es un disco que para quienes tienen una idea formada de U2 o que tienen una falsa impresión por sus últimos discos los va a sorprender gratamente. En su álbum debut suenan diferentes, suenan frescos. U2 en sus primeros años era una banda de cuatro jóvenes irlandeses que tenían actitud y que explotaba su talento llevando el Post Punk (que tomaba influencias como Joy Division, Bowie y se asemejaba a otros grupos como The Cure) que sonaba entonces a un nivel más pasional.

No solo eso, Boy tiene una consistencia asombrosa. Para ser sus primeras armas, es un muy buen disco, casi excelente, donde lo mejor está al principio (un hábito que luego sería recurrente en sus sucesivos discos). “I Will Follow” te engancha de lleno, es pegadiza. Se nota que lograban melodías que no todas las bandas lograban por aquel entonces. “Twilight” es otra destacada pero siendo más oscura e intensa. La apuesta por atmosferas oscuras reaparece en “An Cat Dubh”. La continua “Into The Heart”, que llama poderosamente la atención, por como exploran texturas. Y luego tenemos a “Out Of Control”, un testimonio de su pasión y la energía que transmitían desde su sonido.

La segunda parte de Boy también es muy buena. Bah, el disco entero vale la pena. Sobre todo para conocer esta cara que no conocemos de U2 de cuando eran un conjunto de jóvenes entusiastas con ganas de ser grandes.

Persy