Puntaje del Disco: 8
- Rebel Yell: 8.5
- Daytime Drama: 7
- Eyes Without a Face: 9
- Blue Highway: 7
- Flesh for Fantasy: 9
- Catch My Fall: 8
- Crank Call: 7.5
- (Do Not) Stand in the Shadows: 8
- The Dead Next Door: 7
Una vez asentado como solista y habiendo logrado un gran éxito con su disco debut, Billy Idol volvería en 1983 a conquistar definitivamente el mercado estadounidense. Haciendo honor al título del álbum y la canción homónima, Idol presenta este segundo material como una fuerte combinación new wave pop y hard rock mezclado con sintetizadores, a modo de simplificar la rebeldía que la música y el aspecto punk del artista mostraban.
Gracias a tres de sus más taquilleros hits, “Rebel Yell” ingresó de lleno en las listas norteamericanas e instauraron la figura de Idol como un emblema de los ochenta. Según contó el propio Billy, el nombre “Rebel Yell” corresponde al de una marca de whiskey que vio que los Rolling Stones estaban tomando. Qué mejor motivación que escribir una canción con el combustible que alimentaba a los monstruos británicos!. De similar estilo el disco recopila temas como “Blue Highway” y “(Do Not) Stand in the Shadows”.
En “Eyes Without a Face”, Idol baja un poco los decibeles y demuestra que también puede componer temas no tan rockeros. Lanzado como el segundo sencillo, el tema se convirtió en un éxito inmediato, ayudado por supuesto, como era frecuente en aquellos años, con la difusión del video por MTV. “Flesh for Fantasy”, con un tono sexual y provocativo fue otro de los grandes éxitos en la carrera de Idol.
El resto del disco mantiene la estructura de rock con sintetizadores que logran un trabajo interesante y que en cierto modo muestra una evolución en composición de Idol. Este segundo disco tuvo la colaboración de Steve Stevens, un aclamado guitarrista y compositor. Más allá de la ayuda de Stevens, Idol logró mejorar la producción de su trabajo anterior y se estableció de lleno como una importante figura del rock de los ochenta.
Piro