Los Enanitos Verdes – Contrarreloj (1986)

enanitos-verdes-contrarreloj-4313624

Puntaje del Disco: 7.5

  1. La muralla verde: 8
  2. Conciencia contrarreloj: 7.5
  3. Cada vez que digo adiós: 8
  4. Tus viejas cartas: 7
  5. La luz del río: 7
  6. Simulacro de tensión: 7.5
  7. Sólo dame otra oportunidad: 7
  8. Luchas de poder: 6.5
  9. Es una máquina: 7
  10. Algo terminó mal: 6

Las presentaciones en el Festival de La Falda, en la provincia de Córdoba y ser elegida como Banda Revelación de 1984, significaron para Los Enanitos Verdes un importante impulso en su naciente carrera. Fue un factor fundamental el lanzamiento del álbum debut que contó con el buen tema “Aún sigo cantando” que pasó a ser un clásico del rock nacional.

En 1986, para la producción del segundo disco, la banda de Marciano Cantero, contó con la ayuda de Andrés Calamaro, el joven talento que por entonces mostraba sus dotes en Los Abuelos de La Nada. “Contrarreloj” no cambia demasiado la fórmula del primer álbum ya que mantiene ese ritmo pop característico de los años ochenta. Sin embargo, las experiencias que derivaron del aquel materia, les sirvió a la banda para solidificar su estilo. Levemente, “Contrarreloj” mejora la producción anterior y ofrece una entretenida gama de temas.

Nuevamente pueden notarse ciertas influencias o sonidos que Los Enanitos tomaron de Soda Stereo, sobre todo en “Simulacro de tensión”. También una semejanza con Calamaro se evidencian en temas como “La luz del Río”. Las baladas están bien orientadas (“Sólo dame otra oportunidad”, “Tus cartas viejas”) pero no fueron lo que más me atrajo del disco, sino que me llamó más la atención el clásico “Cada vez que digo adiós” y por supuesto la pegadiza “La muralla verde”, con la que el grupo fue agrandando su popularidad.

Tras el lanzamiento de “Contrarreloj”, Los Enanitos Verdes comenzaron a ver cómo debían ganarle al tiempo ya que las presentaciones fueron en aumento e iniciarían luego una importante gira por Latinoamérica.

Piro

Tu puntuación
(Votos: 0 Promedio: 0)

Deja un comentario