Puntaje del Disco: 8
- Taking Over: 9
- Don’t Forget Who You Are: 9
- Better Than That: 8
- Out of Control: 8,5
- Bombshells: 7,5
- Tonight: 7,5
- What Condition am I In?: 8,5
- Fire in My Heart: 8
- You’re Gonna Get It: 7,5
- Give Up: 7,5
- Darkness in Our Hearts: 8
En su primer trabajo Colour of the Trap, Kane había sido comparado por muchos (incluido yo) con Arctic Monkeys, si, por que el estilo musical de Miles se asemejaba mucho al de Alex Turner ¡Y para colmarla aproximadamente la mitad de las canciones habían sido compuestas por este ultimo! ¿Sería que este hiperactivo británico se quedaría con el triste destino de ser comparado con Turner, considerado como una sombra del vocalista de los Arctic Monkeys?
Y el mismo Kane se encargó de responder con un rotundo “No” con el lanzamiento de su segundo trabajo como artista en solitario, presentando un progreso que no pasa desapercibido; Miles ha crecido como intérprete, se ha pulido llegando a desarrollar una identidad más firme. En pocas palabras, Miles Kane es Miles Kane.
En Don’t Forget Who You Are, Kane se deja influir por la música Mod de los setentas y el Britpop de los noventas, recibiendo tutela por parte de dos grandes estandartes de tales géneros; Paul Weller y Noel Gallagher. El resultado es un álbum intenso de principio a fin. Como mencioné, hay mejoras en este trabajo respecto a su predecesor, el sonido es más conciso y ahora lejos de ser una colección de canciones individuales (como sucedió en el pluridimensional Color of the Trap), el disco suena como un verdadero álbum de música; cohesivo y con dirección.
Pero el mayor avance que percibí es el cómo Miles deja de ser una explosión de energía descontrolada, logrando un mejor manejo sobre sus canciones, esto se percibe especialmente en canciones como la adrenalínica “Taking Over” y el single “Don’t Forget Who You Are”, en estas Kane va elevando sus revoluciones sin perder la cabeza, creando expectación para luego encontrar el momento en que liberar su energía, dándole mayor impacto a la canción creando ganchos memorables.
También tenemos baladas que dan equilibrio al disco, estas de nombre “Fire in My Heart” y la altamente recomendable “Out of Control” que complacería a todo fan de Oasis, estas canciones encuentran complementos en los potentes riffs de “Better Than That” y “What Condition am I In?”.
El veredicto es que Don’t Forget Who You Are es un disco consistente y lleno de optimismo, con cualidades que lo convierten en un mejor trabajo que su predecesor y confirman a Miles Kane como una realidad musical por sí mismo.
Gera Ramos