Jack Johnson – On and On (2003)

Puntaje del Disco: 7,5

  1. Times Like These: 8
  2. The Horizon Has Been Defeated: 6,5
  3. Traffic in the Sky: 8,5
  4. Taylor: 7,5
  5. Gone: 7
  6. Cupid: 6,5
  7. Wasting Time: 7
  8. Holes to Heaven: 8
  9. Dreams Be Dreams: 7
  10. Tomorrow Morning: 8,5
  11. Fall Line: 7,5
  12. Cookie Jar: 7
  13. Rodeo Clowns: 8
  14. Cocoon: 7,5
  15. Mediocre Bad Guys: 7
  16. Symbol in My Driveway: 8

La primera vez que escuche algo de este surfista hawaiano devenido en cantante fue por el adictivo In Between Dreams (2005), material con el que seguramente el mundo entero empezó a conocer de su buena vibra y bonitas melodías acústicas. Pero lo cierto es que Jack Johnson, desde antes se encontraba sacando cautivantes y calmados temas como sería el caso de On and On, disco que data de 2003.

Con la producción del brasilero Mario Caldato, Jr. (Beastie Boys, Manu Chao, entre otros), Johnson continúa con sus guitarras acústicas simples que ya son su marca registrada, pero crecería en sus letras tocando otras temáticas como el materialismo, el capitalismo, guerras, etc.

En On and On continúa haciéndole honor a su admirado Ben Harper, y si bien suena sólido a lo largo de sus diecisiete temas, en especial en “Times Like These”, “Traffic in the Sky”, “Holes to Heaven”, “Tomorrow Morning” y “Rodeo Clowns”, otras son demasiado breves podrían haberse obviado.

Alejado de la vida de excesos que podría tener un roquero y hasta un surfista, la rutina de Jack está hecha de pequeñas cosas: tranquilidad, familia, sus dos hijos y un compromiso por el cuidado del medio ambiente y buena música para relajarse y sin pretensiones como en On and On.

F.V.

Tu puntuación
(Votos: 0 Promedio: 0)

Lombriz como un infeliz

Lo malo de estar vacío por dentro es que por fuera no se nota.

Por fuera, eres el chistosito del grupo, la chica bonita, la inteligente de la familia, el serio y callado, el amigable, la facilona, la apretada, el mujeriego, el quintito, el godínez, el patrón, la señora de la casa, la licenciada, don Germán el de la tienda, doña Cuca la mesera, el viejito simpático, la mujercita en desarrollo.

Te alegra estar alegre (porque, sí, a veces también sonríes, aun cuando casi siempre sea por nimiedades sin sentido); te alegra cuando un chico guapo te dice que eres muy guapa (aunque dos segundos después te des cuenta de que no te lo dijo él, sino su pene); te alegra sacar un diez en la escuela (no importa que eso no sirva para nada en la vida); te alegra que te den el asiento en el metro (porque, a pesar de que te están tomando por débil, tu vejez sí lo agradece); te alegra estar triste (porque al menos sabes que estás, no importa cómo, lo importante es estar de alguna forma y sentir algo… aunque sea dolor).

Por fuera, eres el depresivo, el enojón, la doña malacara, la amargada solterona, el padre irresponsable, el padre amoroso, la abuelita consentidora, la suegra buena onda, el niño genio, la buenona de la clase, la chichona, el casanova, el chingaquedito, el pelionero, el burro, el fósil, el nini, la cegatona, la mujercita en crecimiento.

Quisieras ser un suicida, un sujeto interesante, una puta interesada, un alcohólico patético, un melancólico misántropo, una niña tímida, una mujer famosa, una estrella de rock, una maravilla en la cama, un acostón de las mil experiencias, un anciano muy sabio, un artista del FONCA, un ratero, un criminal, un violador, una psicópata, una santita, una monja, un maricón, un cristiano extremista, un robot del futuro, un alien desalmado, un zombie masoquista.

Por fuera, eres una feminazi, una lesbiana, una machorra, un alumno de diez, alumno de ocho, el reprobado, médico, científico, el de intendencia, cacharpo, garrotero, lavaloza, mantenido, mandilón, mamá soltera, luchona, hija única, bebito berrinchudo, hijo de puta, vieja pendeja, maldita arpía, bastardo imbécil, desgraciada pérfida, el taxista buena gente, el héroe del barrio, el campeón del pueblo, miss universo, la heroína del cuento, la bruja despiadada, la madrastra maldosa, la reina de Inglaterra, el tontito de la cuadra, la mujercita en transición.

Eres un hombre, eres una mujer; lo eres por pura categorización social, por norma hereditaria, por costumbre. Eres un ser humano sólo porque a los seres humanos les parece que eres un ser humano. Por fuera, eres cualquier cosa, incluso cualquier persona; pero por dentro no eres nadie, porque estás vacío, porque a veces ni siquiera el vacío está contigo, porque casi siempre el vacío eres tú.

Lo malo de estar vacío por dentro es que por fuera, regularmente, no se nota.

Kobda Rocha

Tu puntuación
(Votos: 0 Promedio: 0)

Canserbero – Muerte (2012)

Puntaje del Disco: 8

  1. C’est La Mort: 7,5
  2. Es Épico: 9
  3. Ser Vero: 7
  4. En el Valle de las Sombras: 8,5
  5. Maquiavélico: 7,5
  6. Mundo de Piedra: 8,5
  7. Sin Mercy: 7
  8. Un Día en el Barrio: 6
  9. Llovía: 6
  10. Y en un Espejo Vi: 7
  11. La Hora Del Juicio: 7,5
  12. El Primer Trago: 8
  13. De Mi Muerte: 8
  14. Jeremías 17-5: 9

El mito Canserbero comenzó a tomar fuerza después de su trágica y misteriosa muerte, fue hallado muerto con tan solo 27 años después de haber caído del apartamento donde vivía, en una situación confusa que aún hoy continúa siendo un misterio.

Tirone José González Orama nació en Caracas el 11 de Marzo de 1988 y a lo largo de su carrera en en la música solamente había llegado a lanzar dos discos de estudio como solista, Vida (2010) y Muerte (2012), respectivamente, pero así y todo es considerado una de las figuras más destacadas dentro del hip hop latinoamericano.

Ya desde que comenzó a rapear con su característica voz rasgada tomó el seudónimo que lo haría famoso, al comienzo influenciado por el reggae y reggaeton, pero tras el asesinato de su medio hermano, sus referencias musicales cambiaron a géneros más críticos como el hip hop y el hard rock, no comercial. Luego de grabar en colaboración con otros artistas su primer impulso se dio con Vida, gracias a la gran aceptación comenzó a conocerse en otros países de habla hispana.

Con Muerte (considerado uno de los álbumes más importantes del rap en castellano), lograría superar su marca aún más, tomando musicalmente más influencias provenientes del rock y sorprendiendo por sus rimas duras con fuertes referencias a la violencia, al crimen, la crítica social e historias oscuras. Brillando en temas clásicos como “Es Épico” y “Jeremías 17-5”.

En los siguientes años Tyrone llenaría estadios y le inyectó la energía que necesitaba el género en la región, inclusive llegando a trascenderlo, así y todo, con varios proyectos vigentes perdería la vida tempranamente pero su legado permanece activo.

F.V.

Tu puntuación
(Votos: 0 Promedio: 0)

Papa Papaya Papayaso

Un desfile de colores,
de sonrisas de payasos
presumiendo sus amores
surge al vivo de los brazos
de la calle principal.

Con pelucas, brincolines,
van alegres saludando
con cornetas, con clarines;
son artistas parodiando
la figura nacional.

Silban, ríen y saludan
a la gente sin bandera;
a los grises ojos burlan
cuando exhiben su cadera
con sombría libertad.

Maquillaje, motas, rayas
y narices rojas locas,
las sandías, las papayas
que golpean como rocas
a mi patria tempestad.

La silueta celestial
es la única verdad
que el infante más trivial
ha llamado con beldad:
«¡un payaso es mi papá!».

Kobda Rocha

Tu puntuación
(Votos: 0 Promedio: 0)

The Outsider

Puntaje de la Serie:

 

  • Año: 2020
  • Género: Thriller, Policial, Drama, Fantasía
  • Creador: Richard Price
  • Reparto: Ben Mendelsohn, Bill Camp, Jeremy Bobb, Mare Winningham, Paddy Considine, Yul Vazquez, Julianne Nicholson, Marc Menchaca, Cynthia Erivo, Derek Cecil
  • IMDb Rating: [wpmdb_imdb] (Votes: [wpmdb_votes])

Seguir leyendo The Outsider

Tu puntuación
(Votos: 0 Promedio: 0)

Larga vida a la inconsciencia

Es momento de aclarar un asunto que jamás se ha discutido y yo ya estoy cansado de que tan sublime tema sea ignorado sin ton ni son, así es que lo pondré a discusión. La verdad es que exagero; cuando digo que nunca nadie ha puesto el tema sobre la mesa es mera indagación supositiva por ignorancia, irónica y paradójicamente pre-establecida por una proposición de facto contradictoria con los métodos resolutivos de la premisa. En palabras vulgares: nomás hablo por hablar, un ligero fanfarroneo para agitar las aguas de la resiliencia. Tal vez muchos ya lo han discutido y resuelto sin necesidad de tanto alboroto, pero por mera diversión aquí va de nuevo.

La palabra del día es INMORTALIDAD. Éste es uno de los tres deseos más solicitados a genios de lámparas maravillosas (después de dinero y placeres sexuales, claro). La cualidad del ser inmortal es, por etimología, no morir. Simple a primera vista, sin embargo, aquí es donde comienza la discusión en serio: qué significa ser poseedor de inmortalidad. ¡Mucho ojo! Dije poseedor de inmortalidad y que esto no se confunda con el común error cometido poseedor de LA inmortalidad porque lingüística y conceptualmente son dos cosas completas y diferentes, así es que habrá que ponernos de acuerdo.

Quien posee inmortalidad no tiene la cualidad de relacionarse con la muerte. Quien posee LA inmortalidad tiene la capacidad de brindar a quien le plazca la cualidad de no relacionarse con la muerte. Es una cosa casi ilógica, llegando a lo absurdo, como decir “tener hambre” y “tener EL hambre”. Por eso, repito para aclarar, la discusión que se propone aquí se basa en poseer inmortalidad, no LA.

Volviendo al tema principal, buscar la inmortalidad es una ambición estúpidamente exagerada, pues para empezar es una de las principales cualidades que adjudicamos a los dioses. La tentación de convertirse en seres inmortales, id est dioses, conlleva una carga no sólo de complacencia insatisfecha sino también de supremacía imperialista. ¿Quién querría ser un dios si no existiera nada más bajo que eso? Lo que quiero decir es que, si pensamos con sinceridad, la inmortalidad sólo tiene valor porque somos seres mortales. Imaginemos un mundo de dioses inmortales que no conocen lo que es la muerte porque nada en su mundo muere nunca; para ellos, la inmortalidad no tiene valor, es una mera característica adjetiva. Lo preciado de cualquier rasgo identitario es su posibilidad contrastiva hacia una adjudicación congénita. Voy a ponerlo en palabras vulgares: la cualidad que tiene valor es la mortalidad. Lo otro sólo es la negación (in-) de esa cualidad (-mortalidad).

En conclusión, quien frotase una lámpara maravillosa de la cual saliese un genio y le concediere tres deseos de los cuales uno fuese INMORTALIDAD, si se lo medita con verdadero detenimiento, en realidad no está pidiendo algo; por el contrario, está solicitando que le quiten algo, su mortalidad. Ergo, ser inmortal significa estar incompleto, ser defectuoso y, por obviedad axiomática, imperfecto. Ahora, si repensamos nuestra ambición de ser dioses y una característica aún más valorada de la deidad es la perfección, al convertirnos en inmortales estaríamos perdiendo de hecho nuestra predilecta perfección mortal, alejándonos así del propósito inicial (ser dioses). Por tanto, somos dioses porque somos mortales. Ergo, los dioses mueren, los dioses pueden morir y, aún más divino entendimiento, ¡los dioses, para que sean de veras dioses, deben morir!

Post Data.

El dios es un ser perfecto: al ser perfecto, para que siga siendo perfecto, no se le puede (¡no se le debe!) quitar una de sus cualidades: ser inmortal es perder la cualidad de morir: el ser inmortal no es perfecto y, como dios es un ser perfecto, dios es mortal.

Kobda Rocha

Tu puntuación
(Votos: 0 Promedio: 0)