Puntaje del Disco: 8,5
- BLOOD.: 6
- DNA.: 8,5
- YAH.: 7
- ELEMENT.: 9
- FEEL.: 8
- LOYALTY.: 8
- PRIDE.: 7.5
- HUMBLE.: 9
- LUST.: 8,5
- LOVE.: 8,5
- XXX.: 8
- FEAR.: 8.5
- GOD.: 7,5
- DUCKWORTH.: 8,5
Después del insuperable e icónico To Pimp a Butterfly (2015), el rapero del momento Kendrick Lamar tendría una monumental tarea para continuar vigente en la cima del hip hop.
En primer lugar lanzaría al año siguiente una compilación de demos inéditos que quedaron fuera de su legendario LP, sin tanta repercusión pero para cualquier otro hubiera sido un discazo, y en 2017 volvió a dejar su marca con el también exitoso DAMN. Con el Kendrick Lamar ratifica ser el rapero más lúcido de su generación combinando la música de vieja escuela con lo moderno, con una creatividad intacta y brillante, apelando a la simpleza, provando (si era necesario) que puede lanzar un material «mainstream» manteniendo la esencia de su música.
En el transcurso DAMN. Kendrick examina la mayoría de los siete pecados capitales desde su punto de vista y relacionado a su propia historia. Sus letras y música son fuertes y vibrantes de principio a fin, incluyendo algunas de sus mejores composiciones y performances vocales como “HUMBLE.” (su primer hit que alcanzó el top ten de los rankings musicales), “DNA.”, “FEAR.”, «LOVE.» y “DUCKWORTH.”, con la grata sorpresa en las participaciones de Rihanna en “LOYALITY.” y en especial de U2 en “XXX.”.
Comparado con los consagratorios Good Kid, M.A.A.D. City y To Pimp a Butterfly estamos ante una obra más terrenal, mucho menos completa y variada pero Lamar es un artista fantástico y continúa a kilómetros de distancia de sus competidores y seguramanete con los años será recordado como una leyenda del hip hop a la altura de Tupac Shakur y The Notorious B.I.G.
F.V.